jueves, 6 de enero de 2011

Interno de Casa-Hogar “Virgen del Carmen” se queja por presuntos maltratos

BAGUA GRANDE, 6.1.11. (JOSÉ FLORES).- Un joven padre de familia, a quien sólo vamos a identificar como Cléver, realizó una grave denuncia a través de una emisora local contra los conductores de la Casa-Hogar “Virgen del Carmen” de la ciudad de Bagua Grande, que acoge a personas con problemas de drogadicción y alcoholismo. Cléver, que llegó a la radio acompañado de su hermana Lila (profesora) y su anciana madre María (campesina), declaró entre sollozos que en tan solo cinco días que ha permanecido interno en ese lugar, ha sufrido vejámenes que han agravado más su situación psicológica, aparte de los dolores corporales ocasionados por los golpes que ha recibido.
Según narró la profesora Lila, hermana del agraviado, Cléver era una persona normal y dedicada a su trabajo como empleado de una importante firma industrial, hasta que empezó a beber sin medida, lo que ocasionó que la familia tramite su internamiento en la referida Casa-Hogar. “Luego de hablar con la señora Gloria Santín –contó Lila- en la mañana del uno de enero llevé a mi hermano Cléver al lugar donde funciona el local de rehabilitación, donde hablé con un señor al que llamaban “Hermano Julio”, a quien cancelé el derecho de ingreso (cien soles) y el pago mensual (200 soles). Y dejé a mi hermano en medio del llanto de sus señoritas hijas que habían venido desde Lima, donde trabajan, a apoyarlo en esta etapa difícil de su vida”.

Y la hermana siguió contando que por una persona que visitó a un pariente en la Casa-Hogar, se enteró que Cléver estaba siendo castigado, por lo que amaneció en el lugar el miércoles 5, reclamando por la presencia del interno, quien primero fue negado por el Hermano Julio, pero después dejaron que lo viera. Al constatar el estado en que lo habían dejado, decidió retirarlo del refugio y llevárselo a su casa. Pero primero acudió a la Comisaría a sentar la denuncia.
Cléver contó por su parte que el lunes en la tarde, cuando pidió un poco de comida luego de una dura jornada de trabajo en la limpieza del local, recibió como respuesta que dos internos, que hacen de secretarios del Hermano Julio, lo cogieran por los brazos y le propinaran una soberana golpiza, incluso en el suelo, hasta que perdió el conocimiento. Y mostró su cuerpo amoratado por los golpes, como evidencia de la violencia que se ejerce en la Casa-Hogar “Virgen del Carmen”, como método de rehabilitación.
La profesora Lila narró, también, que cuando acudió a rescatar a su hermano, en el interior del local había un joven que arrodillado pedía por favor que lo sacaran de allí. Asimismo se enteró que el día anterior, tres internos se habían fugado del local, lo que demuestra que en el mismo no existe la mínima seguridad.
Cléver aseguró que dicha casa era gobernada por delincuentes, que de noche hacían ingresar prostitutas para su diversión. Se quejaron que la comida era mala y que el trato que reciben los actuales 11 internos era peor que en un penal.

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